jueves, 9 de julio de 2009

El aquelarre de los brujos/as, han conjurado contra mi

El que no este acostumbrado a viajar, uno en el que se sale de España, se atraviesa el Atlántico (unas diez horas de vuelo viendo solo agua y nubes), se hace escala en Nueva York, soporta allí a los gringos, que con el cuento del terrorismo y en especial si no tienes cara de ario eres sospechoso de los mas horrendos crímenes, te desenvuelves dentro de este enorme aeropuerto en un idioma que desconoces (para estos personajes el que no habla ingles es retrasado mental. No conciben el que haya otros idiomas que no sea el suyo, ni que el idioma español, tras el chino mandarín, ), para coger el siguiente vuelo hasta Costa Rica; la verdad es que debe impresionar.
Leer el restoSi a esto le sumamos los estereotipos que te van inculcando desde las agencias de viajes, hasta las amistades que te cuentan el típico organizado que en su día hicieron, vete a saber donde, la cabeza la puedes tener tan fuera de contexto que pienses que mas que hacer un viaje de placer, te diriges a un campo de tortura, o lo que es lo mismo a un Guantánamo.
Todo esto es lo que yo quería evitar que le pasara a mis hijos cuando vengan a verme en especial a mi hija puesto que él ya estuvo aquí y tiene las ideas mas o menos claras sobre lo que se va a encontrar.
En mis conversaciones, a través de Messenger, con ella, he procurado quitarle todo el hierro posible al asunto, en especial hasta su llegada aquí, y una vez asentados, había planeado viajes dentro de Costa Rica, la Península de Osa no se iba de mi mente, pero rápidamente caí en que pensaba mas en mí que en ellos. Lo de comprarme el Suzuki, ha sido consecuencia de esto ultimo.

Por esta parte del mundo no se han enterado de que estamos en una crisis mundial y como consecuencia la demanda en todos los ámbitos a caído en picado, pero mantienen precios desorbitados, en especial los relacionados con el turismo, ya se trate de la venta de terrenos, alquileres de casas o de vehículos, y cuando decidí alquilar un carro, no hacía falta ser un lince para darse cuenta que por un poco mas te comprabas uno, de segunda mano por supuesto, puesto que hay otro mercado, el interior, en el que si van notandola y a falta de dinero se van desprendiendo de pequeñas propiedades como pueden ser los vehículos y en este caso predomina la oferta sobre la demanda.
Ya tengo carro no solo para el tiempo que ellos estén aquí, sino que cuando se vayan seguiré con él.
En cuanto a su estancia, de programar nada. Levantarnos por la mañana, hacer conclave y decidir que hacemos; si llegarnos a una playa, si ver alguna reserva natural o simplemente no salir a ningún sitio y pasar el día aquí entre la piscina y las playas de alrededor. He dejado para cuando lleguen la visita a un árbol solitario que ha crecido dentro del mar (es una especie terrestre) en un paraje que me han descrito como precioso, pero al que no se puede tener acceso en vehiculo; hay que hacerlo andando y lleva mas de una hora.
Resumiendo, cada vez pienso más como los ticos con respecto a hacer proyectos, es mejor que caigan por su peso que mucho planearlos, pero… lo que no pensaba es en una serie de problemas que se me han ido acumulando conforme se me acercaba su llegada.
En su día me caí de la moto en pleno campo, el motor no se paró, la gasolina se derramaba y me encontraba bastante lejos de algún lugar habitado; a deposito lleno sobrepasa los 200 Kgs, pero al levantarla me pareció una pluma, seguí viaje y nada noté, pero al otro día no había forma de ponerme derecho ni con un potro de tortura. El dolor en la zona lumbar era horrible. Algún nervio me debió quedar mal, porque cada cierto tiempo, sin hacer ningún esfuerzo, quedo hecho una alcayata. Bien, hace una semana, iba a sentarme cuando sentí el crujido. Se acerca el día de llegada de mis hijos y cada vez estoy más doblado. Tiene guasa que me encuentro bien como hacia tiempo no lo estaba y ellos me verán hecho una piltrafa. Llamadas, consultas y por estos alrededores nadie conoce a un fisioterapeuta. Pienso en Domy la dominicana y esta mañana me llego a verla; extiende un artilugio, me pone cuasi en pelotas y empieza con una friega y unos golpes en la zona dolorida y al acabar pensaba que la espalda me ardía. Me dolía la quemazón pero andaba derecho como una vela. Me advirtió que al enfriarse lo más probable es que me doliera y que esta tarde me pondría una inyección. ¿Títulos de fisioterapeuta o de enfermera? Supongo que no, o al menos no los dos. ¿Me quitara el dolor? También lo dudo. Es lo máximo que puedo hacer.
También hace unos días, comienza a dolerme una muela. En esto he sido drástico. Dentista y muela al carajo.
La piscina desde que llegue a este país ha sido mi refrigerante. No ha pasado un día sin que me haya estado bañando constantemente. Pues bien (no se cuantos "pues bien" van), hace una semana empieza a verdear, cloro y algicida en grandes dosis, pero las algas engordaban en vez de morir. Esta mañana ha habido que vaciarla, desinfectarla con acido y con cloro y llenándose está.
Han sido otra serie de cosas, aunque de menor cuantía las que se han conjurado en estos últimos días (el carro bloqueado por el sistema antirrobo entre otras).
También es verdad que en estos últimos días ha sido la luna llena y aquí los cambios pueden ser terribles o arreglarlo todo. Espero se cumpla esto ultimo.
Cuando esto lo publique ya estarán de viaje.



Búsqueda en Google de:

3 comentarios:

Bettina dijo...

Estimado José:

Te voy a contar mi propia experiencia en Nueva York,donde estuve,10 días el año pasado y otros 10,el antepasado.
Al preparar mi primer viaje a NY,estaba influenciada fuertemente de comentarios como el tuyo y reconozco,que habían hecho mella en mí,ya que los venía escuchando desde que era niña...
Con lo cual,nos fuímos, mi marido y yo,presos de miedo,desconfianza y temores....Nos cojimos de la mano al pasar la policía,porque mi marido no habla inglés.
Pues,la sorpresa fué que fuímos atendidos, no sólo, con cordial atención,sino que, incluso, con simpatía!
Salimos fuera,cogimos taxi y al Hotel,aólo constatamos,corrección.
Y los 10 días, en los cuales,estábamos, todo el día, en la calle,a cualquier pregunta,se nos explicaba atentamente e incluso, en el metro,nos sentimos perdidos y nos quedamos parados,tratando de ubicar la dirección correcta....y zás,sin pedirlo,alguien nos preguntó si necesitámos ayuda...! y ya dentro del metro,hasta nos indicaron dónde bajarnos y todo!
Quedamos impresionados y conocimos la educación y honestidad en el comercio.
Llevábamos el pasaporte diariamente y nadie nos lo pidió NUNCA ! disfruté de pagar todo con tarjeta,sin tener que mostrar mi pasaporte, que para éso, las leyes allí funcionan y saben de la gravedad de usar tarjetas robadas y a nadie se le ocurriría usarlas.
Del primer viaje nos animamos con el segundo,con mi hijo,que tiene cara de "terrorista"(jejeje) y ningún problema en los segundos 10 días.
Yo, me alegro de haber roto un manido e injusto tópico, porque la mayoría que lo dice, no ha estado,la verdad!

Me alegro mucho,amigo José, que tengas tan queridas visitas y deseo, de corazón, que todo os salga a pedir de boca y disfrutéis,en familia ,del lugar.
Un abrazo!

Perro verde dijo...

Amiga Bettina, la verdad es que no te he contestado antes porque creía que entre el estereotipo que yo tengo de los Estados Unidos y el tuyo, merecía algo mas que un comentario. Tengo in mente hacer una entrada sobre el tema pero circunstancias mandan.
El ritmo que me han impuesto mis hijos o viceversa, no me deja tiempo, pero te prometo que en su día la haré.

Abrazos

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.