viernes, 22 de agosto de 2008

Escribo en mi blog, luego existo

No estoy con otra de mis crisis, estoy completamente seguro de que pasaron definitivamente; tampoco me he ido a Costa Rica, aunque espero sea pronto, y sigo en mi retiro sin ganas de mezclarme con esta civilización, pero se me ocurrió pedirle a mi hijo su PC, con idea de llevar el mío a que le limpiaran en condiciones el disipador de calor, porque estos ingenieros, o son torpes con ganas, o hacen las cosas como para que cualquier tarea de mantenimiento que haya que hacerle al dichoso portátil, haya que llevarlo al taller. Ponen tres tapas, que el quitarlas seria síntoma de avería, y no le ponen tapa al disipador al que en teoría habría que limpiar de continuo.
Por otra parte, el ordenador de mi hijo, estaba hecho unos zorros, tanto en lo referente al software como al hardware. No comprendo que se pueda tener abandonado un aparato del que normalmente uno se sirve.
Aunque el tiempo para mi no existe, mientras he estado atareado con el/la PC, cosa rara en mi, he estado pensando en otras cosas, algunas por mala conciencia mía, como que estuviera ofendida por lo que he dicho en este y en otro blog acerca de la criminalidad en su país, y otras por mala conciencia de los demás, o al menos pienso que alguien debía tenerla, por el asesinato (para mi lo es) de 150 personas en Barajas.
Iba a ponerle un disco duro al PC de mi hijo, me salta un fusible, y no teniéndolo en mi alejado mundo, decido dejarlo y que cada perro se… Vuelvo a coger el mío, me encuentro que Microsoft, ya me quiere meter el Service Pack 1, que Google ha cambiado el formato de Blogger y por ahora no me manda los comentarios a Gmail, y por casualidad leo la barra lateral, y veo que mi amiga me ha dejado un comentario. Es lo único bueno que me ha pasado en estos días, en los que no he visto mas que tornillos, he quitado software y he metido otros, y posiblemente haya mandado a un PC al cementerio.
Mis relaciones con Dedie, epistolares por supuesto, me viene de antes de tener este blog, y si mal no recuerdo el primer comentario que tuve en él, fue de ella, pero un día desapareció, y con gran alegría por mi parte, ha vuelto. Algún día me explicaras que te ha pasado aunque sea en un correo el cual tengo en la parte baja de la barra lateral.
¡Bienvenida seas Dedie!
Tampoco me olvido del resto de amigas/os.
Continuaré.

Búsqueda en Google de:

0 comentarios: