miércoles, 2 de diciembre de 2009

Mi dolor de ojos, nuevo viaje a Puntarenas y la marina tica

Van para dos semanas que me duelen “losojos”. Llegó un momento que era toda la cabeza. Pregunto si en los pueblos cercanos hay un oftalmólogo. No saben de que va, así que pregunto por un medico de los ojos y ya me dicen que nada de nada. Bueno, si esta gente se apaña sin él, yo también. Remedios que me dan: que me ponga una hoja de sábila sobre los mismos, eso si que haya escurrido toda la sabia, que me eche unas gota de limón dulce (no se que coño es), que me restriegue una cola de caballo, paños de agua tibia con azúcar, pero lo que mas me ha llamado la atención es que mastique dos ajos, los aguante todo lo que pueda en la boca (que para eso somos hombres) y por ultimo me los trague. Y algunos mas.
La verdad sea dicha, y pensando evitar ir a San José, algunos los he probado. Lo de los ajos es horrible, por la boca echaba más fuego que el dragón de San Jorge.
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Veo a mi amiga canadiense, le pregunto por un oculista y me recomienda uno de Puntarenas.
He de hacer constar que en los buscadores había puesto oftalmólogos Puntarenas y solo me aparecían ópticas y similares, por lo que si alguien de estos lares se ve en el mismo caso, voy a poner aquí los datos del que me ha visto.

Dr. Gustavo Bender
CENTRO DE LA VISION
En el ROBLE
Urbanización Fiesta del Mar
Parada del autobús de San José en el Roble
En medio del megasúper y el puente de Roble
Frente a cancha de futbol

Continúo con mis ojos. Había decidido que de ayer no pasaba de ir a verlo, así que a las seis de la mañana rumbo a Paquera. A las siete menos cuarto, estaba allí y como la lancha no salía hasta las siete y media le digo a (…) que desayune antes de irse (me había llevado en el carro). Junto al restaurante esta la venta de boletos y veo que no abren. Me acerco por allí y me dicen que la lancha ya no hace viajes y que el ferry lo hace dentro de dos horas. Cabreo supino, pido información de la salida de los ferrys, y me vuelvo. Nadie de este pueblo sabe lo de que no hay lancha.
Hasta cierto punto hice lo correcto puesto que a la vuelta llamé al tal Gustavo, y me dice la señorica que me sale, que solo atiende a partir de las cuatro de la tarde. Le pedí cita para hoy.

Hoy salgo a las doce pensando en coger el ferry de la una. No se si anteriormente he hablado de las carreteras. Bueno decir carreteras es exagerar, hablo de la carretera entre Paquera y Cóbano, que entre otras cosas creo es la única asfaltada en toda la Península de Nicoya. Mucha mas exageración es decir que esta asfaltada; una capa de grava pintada de asfalto. De aquí a Cóbano, cada vez son más los eufemísticamente llamados huecos (baches), que más que tales, son cráteres algunos de ellos superiores al del volcán Arenal, pero desconocía como estaba desde aquí hasta Paquera, y puedo asegurar que una carrera de obstáculos nada tiene que ver; son muchos los que hay que pasar en primera y ganas he tenido de probar la tracción a las cuatro ruedas. El año pasado por estas fechas, los habían reparado, eso si en plena época de lluvias, y siendo el asfalto enemigo mortal del agua, duraron lo que un caramelo en la puerta de una escuela, pero este año dicen que no hay presupuesto así que supongo que la próxima vez que vaya a Puntarenas lo haré campo a través (con el gasto de amortiguadores habría para repararla en condiciones).
Por fin doy con el parqueo vigilado, dejo el carro, cola para sacar mi boleto, me acerco a la entrada del ferry, pasa un cuarto de hora de la una y allí no entra nadie. Veo que sale el capitán y no dudo en preguntarle que qué pasa. Muy fácil, me contesta, es que sale a las dos.

Vamos a ver, le enseño el papel impreso que me dieron ayer, aquí dice a la una
Es que le dieron el horario que rige a partir del día doce
Estoy en Costa Rica y me calmo.
Sirve para que entablara conversación con él, diciéndole que yo estudie náutica y le pregunto donde estudio él. No hay Escuela de Náutica, nos enseñaron algo en el INCAE y termine en Panamá, donde no añadieron nada a lo que aprendí aquí. Seria lo que es un Patrón de Cabotaje.
¿Qué significado tienen cuatro barras de catorce milímetros en las palas? (mas que un almirante)
No lo se
Continuamos conversación sobre lo mal que navegan los de los guardacostas (me lo decía él) y a raíz de esto el que de la zona marítima de Costa Rica solo este vigilada el veinte por ciento. Con la pesca que les roban, en especial japoneses y chinos, tendrían para tener una armada superior a la de Hugo Chávez.
Por fin salimos.

A babor la isla de San Lucas. Quien no la fotografía de nuevo después de, por fin, haber leído La isla de los hombres solos.

A estribor Isla Guayabo.

El cardumen debía ser apetitoso. Las aves marinas parecían estar dándose un buen festín.

Por la proa la punta de Puntarenas.

Ya en Puntarenas cojo un taxi y directamente al medico. Son muchas las veces que he pasado por esta ciudad, pero nunca dejara de admirarme su construcción tan extendida y su colorido.

Llegada a la “clínica”. Curiosamente el oftalmólogo es argentino. ¿Qué hace un español por aquí? Y le contesto ¿Qué hace un argentino en Costa Rica? Dejamos las preguntas en el aire.
Me sorprende que con unos instrumentos que mas que tales parecían juguetes, el reconocimiento que me hace. No tienes tensión ocular, al decirme que veías mejor con las gafas antiguas sospeche, en principio, de cataratas, pero nada; comprueba graduación de ambas gafas y de la vista y también me dice que no me hacen falta nuevos cristales. Los ojos los tienes bien, nada por lo que puedan dolerte, pero yo solo te puedo reconocer eso, los ojos, pero no lo que hay detrás, así que si persisten los dolores, te aconsejo que veas a un amigo mío que es neurocirujano.
Le digo la señorica que me llame un taxi, pero que venga volando. Temía perder el ferry de las cinco con lo que tendría que esperar al de las ocho.

Embarco y a los cinco minutos desatracamos. Puesta de sol preciosa.
Llegada a Paquera, entre la visión borrosa, por unas gotas que me echó y que advirtió que aparte de borrosa me molestaría la luz, los baches de la carretera, la lluvia y que los ticos no hacen el cruce ni borrachos, milagro es que llegara bien.
Siento si he dicho algo que haya molestado a mis amigas ticas y tico/españolas, pero así es como lo veo y como lo pienso.


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