lunes, 17 de diciembre de 2007

Proyectar y no cumplir

Puede que fuera en los peores momentos de mi depresión, cuando me encontré con la mujer de un compañero de trabajo, la cual me pregunto que qué tal andaba de moral y mi respuesta fue que estaba hecho una mierda a lo que me contesto que ella había pasado por otra y que volvió al trabajo y la relación con sus compañeros, hizo que le fuera desapareciendo hasta que se fue por completo. Ya he dicho que uno quiere agarrarse a un clavo ardiendo, por lo que fui a buscar al Inspector Medico para pedirle el alta y volver yo también al trabajo y probar la misma medicina. Estas personas cuya misión principal es precisamente esa, hacer que los enfermos vuelvan cuanto antes al trabajo para evitarle gastos a la Seguridad Social, no debió verme muy bien cuando me dijo que me lo pensara, puesto que si no me salía bien lo que iba a ocurrirme era que me iba a hundir mas. Palabras santas, o los compañeros de la citada mujer eran mas sensibles o los míos eran unos cabrones, porque fui cayendo a tal profundidad del abismo, que ni fuerzas tenia para volver a pedir la baja.
Jamás se me han olvidado aquellas palabras. Cuando en momentos de mejoría, normalmente al acabar el día, me decía mañana voy a cambiar una bombilla, y llegaba el mañana y veía que ni eso era capaz de hacer, quería reventar, por lo que a partir de entonces ya me decía, mañana voy a hacer un taladro, pero siempre me añadía la coletilla de si me encuentro bien. Aunque parezca mentira, esta actitud, me fue de gran ayuda durante mi enfermedad, pero es que hoy en día, dándola ya por vencida, procura seguir aplicándome esta máxima. Llevo tiempo estudiando sobre los orígenes de la vida, no ya en este planeta sino en el universo, y para escribir medio folio sobre el tema, debo de tener los conocimientos suficientes, pues bien, como me diga mañana voy a hacerlo, mañana tengo la mente en blanco.
Cuantas veces hemos visto películas en el que un escritor se pone delante de un folio en blanco y blanco se queda, y esto es la pescadilla que se muerde la cola, cuanto mas te obsesiones con que tienes que hacer una cosa, la mente cada vez se niega mas a cumplir tus deseos y cosa curiosa, un día que ni habías proyectado nada, sin saber el por qué te encuentras haciéndolo. Alguien me dirá que esto no se puede aplicar al trabajo, a lo que les contesto que analicen lo que hicieron a desgana, y puede que cuando ya no tenga solución se darán cuenta de que podían haberlo hecho bastante mejor.Aunque me repita, en especial para los depresivos: Nunca hagas proyectos que no puedas cumplir.

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