Julio Anguita. Un político coherente

Por aquí hay un dicho, “Genio y figura hasta la sepultura”. Este es para mi Julio Anguita. El milita de toda la vida en el Partido Comunista, que unido a otros partidos de similar ideología hicieron coalición formando Izquierda Unida. Fue elegido Secretario General de la misma, y con el alcanzaron el máximo numero de diputados en el Congreso. Después del tercer problema cardiovascular, abandono la política. En 2003 sufrió un gran revés, su hijo Julio Anguita Parrado fue uno de los dos periodistas españoles muertos en Irak durante la invasión. Una frase suya, malditas sean las guerras y malditos los canallas que las apoyan, fue muy utilizada por los manifestantes en contra de esta guerra.
Bajo ningún concepto intento hacer aquí una biografía suya.
Había desaparecido de los medios de comunicación, pero como consecuencia del descalabro electoral sufrido por la coalición, que en su día lidero, en las ultimas elecciones ha vuelto a aparecer y las otras noches lo vi en una entrevista que le hicieron en TV. Se le nota el paso de los años pero su lucidez mental va a mas.
En una entrevista le preguntaron: ¿Qué valora en un político?, a lo que él contesto: La sinceridad, que surge de tener un proyecto propio y estar convencido de las propias ideas. Y a partir de ahí, hablar como se piensa y vivir como se habla. Pues bien esto es lo que siempre he admirado de él, pero no como político, sino como persona. A pocas he visto siendo tan coherente con lo que piensa. A pocas personas he visto razonar tan bien sus respuestas. Es Maestro e Historiador, pero en todo lo que habla deja entrever una gran cultura.
No comulgo con ninguna ideología y mucho menos con la comunista, desde que observe que ya a los niños, desde que tienen uso de razón, les afloran sus genes del sentido de la propiedad, pero dentro de toda la bazofia de políticos que por el mundo andan, su vuelta será una brisa de aire fresco.

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