Pay-per-click y las moscas cojoneras

Es mas de una vez la que he dicho que el blog es una poderosa herramienta que han puesto a nuestro alcance; no solo puedes expresar libremente tus opiniones (Aunque como en todo hay un limite), sino que puedes relacionarte con todo el mundo, y también hay que decirlo, que la mayor parte buena gente, pero ha llegado el puñetero dinero, y donde él aparece, casi todo lo pervierte.
Desde que se invento la publicidad pay-per-click de una forma u otra ya no dejan tranquilos a los que no tenemos ningún interés crematístico, pero que por causas que ni yo mismo llego a comprender generamos cierto tráfico. Los más preparados suelen redirigir el tráfico de sus dominios a páginas de parking de dominios: páginas con enlaces patrocinados que les generan ingresos por publicidad; esto lo hacen mediante un troyano que infecta cantidad de PC´s y controla el número de clics para no levantar sospechas o el patrón de comportamiento de la máquina infectada, logrando que actúe como cualquier usuario normal. El desarrollador de este tipo de troyanos no busca notoriedad. Un programador de virus quiere difusión y reconocimiento. Un programador de robots de clics quiere discreción y dinero. Podemos encontrarnos con multitud que estén satisfechos con pequeños resultados infectando porcentajes muy bajos de máquinas lo que les evite ser detectados y sabiendo que pueden ganar 2.000 o 3.000 euros al mes con sólo 10.000 máquinas infectadas adjudicándole a cada una 20 o 25 clicks de buen valor en ese periodo. Aunque parezca que digo una barbaridad, estos personajes a mi no me molestan; estafan a las empresas anunciantes sin joder tu PC, pero hay otros, normalmente cortos de entendederas, que un visitante anónimo me los ha definido perfectamente: “Las moscas cojoneras”.
Estos últimos se van al ranking de los blogs mas visitados, y se dedican a hacer comentarios unas veces alabando lo interesante del tuyo y otras diciendo gilipolleses, con el único fin de que bien tu o tus visitantes vayan al suyo y conseguir un puñetero clic. Más de una vez he pensado en eliminar estos dichosos comentarios, pero por ahora no soy de los más atacados y bastante trabajo se toman para conseguirlos. Lo único que les pido, es que nos dejen tranquilos; hay muchas formas de ganar dinero y una de ellas es trabajando como cualquier hijo de vecino, y que por mucho que ellos crean nunca van a llegar a ser un Bill Gates.

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