martes, 15 de julio de 2008

Recuperación de vehículos y aperos antiguos

Ha sido mi hijo el que me ha traído una revista, en la que dice que en Granada, han abierto un taller en el que se dedican a restaurar motos antiguas. Lo celebro, pero como en todo, llegamos tarde. Coloco aquí su página , por si alguien que tenga alguna y sus conocimientos de mecánica no sean suficientes como para restaurarla él mismo, sepa que ya hemos dado un paso.
Siempre me ha llamado la atención, por no decir que me ha desesperado, que desechemos con tanta facilidad lo viejo, y cuando digo viejo, no solo me refiero a los vehículos de dos ruedas, sino a aperos agrícolas, muebles, y por que no a .

Puedes continuar leyendo... Cuando me retire de navegar, para hacerme a mi nueva vida de terrícola, me retire cosa de un mes a un pueblo de la sierra, que por aquel entonces tenia difícil acceso, por lo que los visitantes eran tan escasos que cuando aparecía uno era el tema de conversación para sus habitantes, razón por la que me entere, que había aparecido un comerciante (un caradura que se aprovechaba de la ignorancia de aquellas gentes) que les compraba aperos, muebles y todo tipo de cosas antiguas, pero hubo una en especial que me llamo la atención, y fue la venta de escopetas de caza, que provenían de sus padres y que eran verdaderas joyas. Cuando intente hacerme con una, como he dicho, llegue tarde; ya se las habían vendido todas al elemento este. Cuando me fui del pueblo investigue quien era el fulano, para recuperar cosas, pero tiempo perdido, las vendía en el extranjero.
Ya trabajando en la azucarera, me encontré una Montesa con las ruedas desinfladas, a la que ni siquiera se habían entretenido en tapar. Era el mismo modelo que una que tuvo mi padre y en la cual aprendí a conducirlas, cuando ni los pies me llegaban al suelo. Por las tardes, me entretuve en desarmarla y ponerla en funcionamiento. El que la había abandonado, sintió envidia por lo que me la pidió; se la di sabiendo cual iba a ser su final, como así fue, acabo en la chatarra.
Muy cerca de Granada, hay una base de aviación, que siempre fue escuela de pilotos militares. En la actualidad es de helicópteros, pero en su día fue de aviones, pero con la particularidad de que los aviones con los que hacían las prácticas, eran biplanos de origen alemán, pero que después se fabricaron en España. Llega la modernidad, alguien decide que hay que utilizar otros aviones, pero no se les ocurre otra cosa que ponerlos a subasta. Todos fueron para el extranjero. ¡Como coño nadie pensó que su sitio era un museo! En mis viajes por esos mundos, estuve en el Museo de la Ciencia de Munich, y no solo tenían todo tipo de aviones de los utilizados en la segunda guerra mundial, sino que se habían entretenido en trasladar un avión derribado, incluyendo el terreno en el que había caído. Pero aquí no acaba la cosa, mi cuñado Jean Marie, su padre fue piloto en la segunda guerra mundial, es un enamorado de estos viejos cacharros, y estuvo expresamente en Inglaterra, en un campo de aviación abandonado, donde voluntarios, se dedicaban a restaurarlos y a tenerlos en funcionamiento.
El expolio a que ha sido sometida España, gracias a la desidia de nuestros gobernantes, ha sido de verdadera pena, puesto que no solo ha sido de aperos muebles y vehículos, sino el que se ha hecho en todas las iglesias en las que bandas organizadas y sabiendo que la vigilancia era nula, todo el arte sacro ha desaparecido.
Yo de toda la vida, he tenido admiración por las antigüedades, y si no tengo más es por falta material de sitio, desde maquinas de coser accionadas a mano, faroles de carburo, y hasta cuatro motos contando la que utilizo que es del año 87, y que mi hijo quiso que cambiara por una BMW ultimo modelo a lo que me negué. A pesar de haber estado junto a ella muy cerca de la muerte, son muchas las veces que me ha hablado durante mi depresión, y puede que también me haya salvado la vida, puesto que me decia cuando no estaba en condiciones de montarla.
También tengo una Vespa de las primeras que fabricaron, que un compañero de trabajo, la tenia abandonada, se la pedí, le repare el motor, pero cuando llegue a las chapas, vi que no era capaz de hacer nada. Sin saberlo ya estaba con la depresión. Estoy seguro que alguien la pondrá a funcionar.


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