sábado, 15 de marzo de 2008

La primavera las neuronas altera

Por aquí hay un dicho que dice: La primavera la sangre altera, y aplicándomelo, digo que a mí, de lo que estoy completamente convencido es de que no es la sangre, sino las neuronas. Aunque todos los días al despertarme lo primero que me digo es que la depresión ya me ha pasado (Una mentira, después de mucho repetirla se convierte en verdad, y ojalá ocurra con esta), pero conforme va pasando la mañana, se va apoderando de mi un cansancio que para nada es físico; es cansancio mental, mucho mas jodido que el físico, porque independientemente, de que ves el mundo muy complicado hasta el punto de que te encuentras incapaz de hacer un puñetero crucigrama, cosa que cuando estoy bien los hago de carrerilla, te pasan por la cabeza quehaceres pendientes, pero no hay forma de llevarlos a cabo, porque el cerebro se encarga de difuminarlos.
Ya el año pasado descubrí un remedio contra este estado de ánimo y fue seguir bañándome en la piscina, cosa que estuve haciendo hasta el mes de noviembre en el que deje de hacerlo, porque ya el agua estaba tan fría que note un dolor en la nuca, que relacione con principios de hipotermia. El día uno de este mes, estando con los mismos síntomas de cansancio, recurrí a mi medicina, pero el agua seguía hecha un témpano, por lo que lo he postergado hasta hace unos días en que llevo haciéndolo a pesar de que la temperatura del agua no es mucho lo que ha subido.
No se que relación existe entre el frío y el bienestar de las neuronas, pero puedo asegurar, que durante un buen espacio de tiempo, me hace mas efecto que la mayor dosis de antidepresivos que te puedas tomar. Alguien puede pensar que bañarse con temperaturas ambiente cercanas a los cero grados es de locos, pero seguro que no saben lo que es el cansancio mental.

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